Rueda de prensa de COTA: la vida sigue igual

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La sala de prensa del circuito de las Américas fue escenario de la tercera rueda de prensa de MotoGP de 2016. En esta ocasión, volvieron a coincidir Marc Márquez, ganador de la última carrera y actual líder del Mundial, y Valentino Rossi, que subió al segundo cajón del podio en Termas de Río Hondo y es el subcampeón en este momento. Sentados juntos por exigencias del “guión”, de nuevo eludieron el saludo.

Márquez reconoció sentirse a gusto en este trazado, donde ha ganado todas las carreras desde 2013, y que tiene “buenas sensaciones sobre la Honda”. Rossi, por su parte, se mostró expectante por los neumáticos que Michelin utilizará en Austin. Sobre Argentina, aseveró que durante la primera parte de la carrera, aunque cambió todo cuando llegó el ‘flag to flag’ y tuvo que coger la otra M1, con la que veía complicado llegar al podio.

El italiano echó balones fuera cuando los periodistas le preguntaron sobre la posibilidad de que su compañero de box corra en Ducati, donde él estuvo dos años que fueron un ‘calvario’ en el brillante currículo del corredor de Tavullia.

Junto a ellos, uno de los grandes protagonistas del fin de semana, Jorge Lorenzo, pendiente de desvelar su futuro para 2017, y que en esta comparecencia señaló que “no voy a decir más de lo que comenté en Argentina. Cuando tome una decisión sobre mi futuro, lo sabréis todos”. Aunque lamentó el 0 de Argentina, añadió que “sigo mirando hacia adelante, porque sé que tengo un buen potencial en condiciones normales”.

Protagonista también Maverick Viñales, a quien todos señalan como sustituto del piloto balear en la casa de los diapasones. El de Roses, que terminó por los suelos tras un vibrante cuerpo a cuerpo con Rossi en Termas, no pudo ocultar su decepción por la caída en Argentina, “ya que me hubiera gustado mucho darle un podio a Suzuki”. Respecto a la presión que se respira en el paddock con toda la rumorología sobre cambios en los equipos, recalcó que esta situación “me ayuda a estar más concentrado”.

Por su parte, Andrea Iannone, que fue el causante de la debacle de Ducati en la última curva, cuando él y Dovizioso tenían aseguradas la segunda y tercera posición, pidió disculpas por el incidente y no se atrevió a asegurar si el accidente influirá en su futuro en Ducati. Iannone explicó que pensaba que Rossi le adelantaría en la última curva, lo que propició que intentara el adelantamiento por la parte sucia de la pista y perdiera el control de la ‘Desmosedici’. “He empezado muy mal”, afirmó.

Hay que recordar que esa acción le costará al italiano tres puestos en la parrilla de COTA y sumar su primer punto de sanción en el carné de pilotos en 2016.

Primera intervención en su todavía corta trayectoria en la categoría reina de Eugene Laverty, quien cruzó la línea de meta en cuarto lugar en la loca prueba argentina. El corredor del Aspar Team se mostró satisfecho y con mejores expectativas porque “este año la moto es más estable”, aunque para el irlandés queda mucho por desarrollar: “Nos sentimos como en pretemporada”.

Todos coincidieron en la importancia de regular la limitación de velocidad al entrar en el pit lane a raíz del accidente que a punto estuvo de costarle un serio disgusto a un mecánico de Álvaro Bautista.

Pero la verdadera acción comienza mañana a partir de las cuatro de la tarde, cuando el semáforo se ponga en verde y salten a la pista los chicos de Moto3, que una vez más serán los encargados de dar el pistoletazo de salida. Toda la información en @blogenboxes. ¡Os esperamos!