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Parece que la guerra abierta entre Vettel y Webber, los dos pilotos de Red Bull, puede terminar una vez más perjudicando al australiano. Por el momento nadie ha movido ficha dentro de la escudería. El alemán pidió perdón y aquí paz y después gloria.
Tuvo que ser su padre el que confirmara que sí estaría en el GP de China que se disputa el próximo fin de semana después de la sucia jugada del germano, adelantándole para ganar en Sepang cuando había órdenes de equipo de que no lo hiciese.
Ahora empiezan a surgir rumores sobre el futuro de Webber, cuya relación con su compañero de escudería nunca fue buena y desde el pasado domingo ha sufrido un agravamiento importante hacia peor.
De hecho, el dueño de Red Bull, Dietrich Mateschitz, ha dejado caer que cuentan con Kimi Raikkonen (que termina contrato con Lotus al acabar esta temporada) como candidato para 2014, añadiendo, además, que su relación con Vettel es “excelente” desde siempre.
Ahora habrá que esperar la reacción del australiano ante estas declaraciones de su jefe y ver si es capaz de concluir el Mundial en un equipo donde siempre se le ha tratado como un segundón, aunque fuera más rápido que el alemán. Como muestra un botón.