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Ya hace tiempo que el nombre de Kimi Raikkonen suena como posible sustituto de Mark Webber en Red Bull, después del cisma con su compañero de equipo, Sebastian Vettel, tras arrebatarle la victoria y saltarse las órdenes que llegaban desde el muro en Sepang.
El alemán ha declarado que no le importaría que el otro volante de la escudería austriaca fuera para el finlandés, sin embargo Iceman está muy a gusto en Lotus, donde ha encontrado la tranquilidad, concentración y motivación suficiente para volver a estar en lo más alto de la Fórmula 1 (está clasificado en la segunda plaza del Mundial).
Con esto y con todo, lo que está claro es que a pesar de que Marko diga lo contrario, Webber va a salir de Red Bull el año que viene como muy tarde, ya que la situación es más que incómoda para el australiano, cansado ya de ser siempre el segundo piloto.
El beneficiado de todo este embrollo sobre cuatro ruedas puede ser Daniel Ricciardo, que ante la casi segura negativa de Raikkonen, podría pasar de conducir un Toro Rosso (el coche “satélite” de Red Bull) a llevar el volante del monoplaza más competitivo de la parrilla.
Aún quedan muchas carreras por delante y es pronto para hacer pronósticos, pero tiempo al tiempo.