Photo by MotoGP.com
Valentino Rossi y su mecánico jefe Jeremy Burgess romperán su asociación tras la carrera de este domingo en Valencia. El piloto italiano y el ingeniero australiano han trabajado juntos durante 14 temporadas, todas las que Rossi ha disputado en la categoría reina del campeonato.
Ha sido una de las relaciones laborales más fructíferas en la historia del motociclismo. Juntos, Valentino Rossi y Jeremy Burgess han ganado siete títulos mundiales en la categoría reina. El dúo ha vivido momentos de gloria (muchos) y otros más bajos (los años con Ducati). Mañana arrancará su último fin de semana de trabajo mano a mano, según ha anunciado Rossi durante la rueda de prensa rueda de prensa del jueves.
“Jeremy es como mi padre en el paddock, pero necesito nuevas motivaciones, nuevas ideas” ha asegurado Rossi. “Hemos hablado hoy, cara a cara. El próximo año será crucial y necesitaré nuevas motivaciones. En las últimas carreras he estado pensando que quería trabajar de una manera diferente. Él se habría quedado el próximo año, pero yo tengo la intención de intentar renovar por los dos siguientes. Al final no hemos dado un abrazo, me ha entendido”.
“Ha sido una decisión difícil de tomar, Yamaha me lo había preguntado hace algún tiempo, pero lo he decido sólo ahora. Después de la etapa en Ducati, quería volver a Yamaha con Jeremy, ganar con él habría sido lo máximo”.
Ningún indicio todavía de quién reemplazará al veterano técnico australiano “En mi cabeza está la idea de intentar algo nuevo ahora. Siempre lo he hecho así en mi carrera. El año que viene tengo que ganarme la renovación con Yamaha y debo ser competitivo. Todavía no sé quién será quién será mi nuevo mecánico jefe, el lunes [en el test post GP] dirigirán el box Mateo Flamigni y Hiroya Atsumi”.