Cuando parecía que Márquez y Dovizioso empezaban a distanciarse del resto en la lucha por el Mundial, un nuevo golpe de efecto vuelve a apretar el campeonato.
Cuarta victoria de la temporada para el italiano de Ducati que es ya el que más acumula en lo que va de temporada. Además, la rotura de motor de la Honda de Marc hace que Dovi recupere el liderato de la categoría reina. Llegaba a Silverstone sabiendo que no sería un circuito fácil para Ducati.
Sus resultados a lo largo del fin de semana así parecían confirmarlo. Con tiempos más bien disimulados, el de Forli logró clasificarse sexto en parrilla. No era el mismo Dovizioso de Austria, aquí daba la sensación de que no tenía ritmo, ni siquiera a una vuelta y, aún así, Márquez no lo descartaba para el domingo. Y no se equivocaba el catalán.
El italiano empezaba la carrera de la misma forma que el fin de semana, tapado. Pero poco a poco se iba acercando a las posiciones de podio. Rossi, que pese a expresar públicamente el jueves que se veía fuera de la lucha por el Mundial, demostraba lo contrario en pista. Se apagaba el semáforo y el Doctor, que corría su GP número 300, salía lanzado para colocarse primero.
Parecía que el de Tavullia quería emular su victoria del año pasado en Jerez, en el que dominó durante todas las vueltas. Pero su compatriota no iba a permitírselo. Sí, Rossi tiene hambre de título, pero Dovizioso también. Empezó el año con la certeza absoluta de que Ducati seguía sin estar preparada para ganar Mundiales, especialmente después de perder las famosas alas. Pero tras media temporada completada y tres victorias a sus espaldas, Dovi ya cree en lo imposible y no piensa dejar escapar esta oportunidad.
El que también vuelve a reengancharse a la lucha es Viñales, a pesar de que se le sigue escapando la victoria desde el GP de Le Mans, aunque por poco. De haber tenido un par de curvas más por delante, habría podido luchar por la victoria cuerpo a cuerpo. Finalmente ha entrado a 1 décima de Andrea y, lo más importante, por delante de su compañero de equipo. La cruz de la carrera ha sido para Márquez, obligado a abandonar tras romper el motor de su Honda, algo insólito en la marca nipona.
Lo hacía a seis giros del final, cuando luchaba por la segunda posición con Dovizioso. Con el de Silverstone, el vigente campeón acumula ya tres ceros en su casillero, el que más entre los cuatro favoritos, aunque conserva la segunda posición a nueve puntos del de Ducati.