Terminó la concentración Pingüinos, que cada año se celebra en Valladolid, y que se ha convertido en una de las citas más importantes para los amantes de las motos, que durante cuatro días se reúnen en la provincia castellana y para compartir su afición por las dos ruedas, hacer actos en recuerdo de los fallecidos y homenajear a personajes ilustres.
En esta ocasión los casi 28.000 inscritos en la edición 2014 pusieron su particular alfombra roja para distinguir con el Pingüino de Oro a tres grandes: Carlos Checa, que este año anunció su retirada de la competición, Álex Crivillé y el maestro Antonio Maeso.
Jornada de gala con esta entrega de trofeos que puso punto y final a este acontecimiento que cada vez toma más relevancia entre los amantes del motor.