Hoy cumple 37 años. Y Valentino Rossi, con 9 títulos mundiales a sus espaldas, aún no ha decidido si continuará compitiendo en MotoGP. A finales de año expira su contrato con Yamaha y, por el momento, el único plan es luchar en la pista por el décimo mundial, que estuvo a punto de lograr en 2015, y que finalmente fue a parar a manos de su compañero de equipo, Jorge Lorenzo.
El italiano sí ha dejado algunas pistas respecto a este tema; y ha asegurado que en el caso de seguir corriendo, lo haría por dos años más, sin aclarar si sería con la casa nipona o daría un nuevo giro profesional en su carrera.
Pero 2016 será un año clave no sólo para Rossi. Los ‘cuatro magníficos’ terminan contrato con sus respectivos equipos y las especulaciones se hacen mayores a medida que se acerca el comienzo del Mundial.
Mientras unos hablan de un alejamiento de Márquez con Honda, ya que no ve mejoras que le permitan estar arriba este campeonato, otros apuntan a que Lorenzo ha recibido una más que sustanciosa oferta de Ducati para que forme parte de sus filas desde 2017.
Yamaha, entre tanto, ha manifestado la importancia de contar con el mallorquín en su equipo y llevar a cabo la renovación cuanto antes.
Con este panorama, no hay duda que la temporada va a ser larga también en el capítulo de negociaciones para reubicar a los mejores de MotoGP. Y todo ello sin olvidar a Casey Stoner, quien es más que probable que dispute el GP de Qatar de la mano de Ducati, quien ya ha dado ‘permiso’ al australiano para correr después de recuperar sensaciones con la ‘Desmodici’ en los test oficiales de Sepang.
De momento, mañana toca nueva tanda de entrenamientos en Phillip Island. Serán los penúltimos del invierno, a falta de los que se llevarán a cabo en el trazado de Losail dos semanas antes de que se apague el semáforo y comienzo el verdadero espectáculo del motociclismo.